Partiendo del ritmo anterior, daremos con la derecha un golpe abajo al final del ejercicio que servirá de unión entre este patrón rítmico y el siguiente (sea el mismo u otro).
Igual que en el ejercicio anterior, hay que llevar especial cuidado con la combinación de golpes que se le presenta a la mano derecha en la parte central del ejercicio, pues ha de dar un acento grave, un golpe débil agudo, un acento grave y un acento agudo. De esta secuencia debemos llevar mucho cuidado con el golpe débil, ya que la inercia de la mano hará que, si nos descuidamos, lo demos acentuado.